Además de las adicciones con sustancia, existen las conocidas adicciones sin sustancia o comportamentales. Ambos tipos de adicción funcionan de una manera muy similar, y por tanto, los objetivos terapéuticos son similares.
Las adicciones comportamentales incluyen:
- Juego patológico o ludopatía
- Adicción a las nuevas tecnologías
- Adicción al sexo
- Adicción a la comida
- Adicción a las compras
Una de las adicciones comportamentales que tiene una alta prevalencia en la sociedad actual es el juego patológico o ludopatía. Esta adicción se caracteriza por un patrón de conducta patológica relacionada con el juego, y presenta los siguientes criterios diagnósticos según el DSM-5:
- Fracaso repetido en los esfuerzos por controlar, interrumpir o detener el juego.
- Inquietud o irritabilidad al intentar interrumpir o detener el juego.
- Uso del juego como vía de escape de los problemas o alivio del malestar emocional.
- Intentos repetidos de recuperar el dinero perdido.
- Preocupación excesiva por el juego, buscando formas de conseguir dinero para continuar la conducta y planificando futuras ocasiones para jugar.
- Necesidad de apostar cada vez más dinero para obtener el mismo nivel de emoción.
- Engaño a familiares, terapeutas u otras personas para ocultar la implicación con el juego.
- Afectación de diferentes áreas de la vida del jugador, como lo laboral, social o educativo, debido al juego.
El tratamiento se basa, igual que en las adicciones con sustancia, en la reestructuración de la personalidad y la vida del paciente.
Se instauran nuevos hábitos en su día a día, controlando los estímulos que perpetúan la conducta y se entrena en prevención de recaídas. Igual que en el otro tipo de adicción, las terapias son tanto individuales como grupales.
El enfoque es cognitivo-conductual, trabajando tanto la conducta problema en sí como las creencias e ideas irracionales asociadas a la adicción.
No dudes en solicitar una primera visita gratuita donde valoraremos el mejor tratamiento a seguir.